Hemos entrevistado Matteo De Rose, el periodista que viviò la locura de la llegada de De Rossi a Baires.

Hola Matteo, e gracias por la entrevista. ¿Cuándo escuchaste sobre tu “viaje argentino” y cómo reaccionaste?
“Fue una cosa (des)organizada en menos de una semana. Decidí en poco tiempo. Estaba listo para partir cuando estaba seguro de que De Rossi tomó el vuelo a Buenos Aires, de modo que el domingo 21 fui al aeropuerto con un tranvía a cuestas. Pero informado de que los ‘16‘ no habrían comenzado en esa fecha (la reserva estaba allí pero con Boca se decidió posponer la llegada), también la pospuse. El miércoles fue el último día posible para mi viaje, desde entonces tendría que regresar al vuelo 30 y, por lo tanto, cualquier otro desliz habría sido fatal para mí: menos de 6 días habrían sido realmente muy pocos. Pero afortunadamente era miércoles por la noche: tomé el mismo vuelo de Alitalia a las 21.45 con De Rossi y sus ‘familiares’ y comenzó una fantástica aventura de 6 días.”

Usted estuvo presente en la bienvenida de los hinchas en el aeropuerto, ¿cuál era el clima?
“Estaba a unos pasos de De Rossi en los controles, inmediatamente después de que se entregara el equipaje. A partir de ahí, solo una puerta automática dividió el interior del aeropuerto con cientos de ansiosos hinchas esperando a las 6:30 a.m. A la llegada del centrocampista la ‘locura’. No fue tanto el número de personas lo que me golpeó, sino el ímpetu absoluto, la pasión que lo abarca todo, el deseo abrumador de ver de cerca y tocar el nuevo volante ‘Xeneizes’. Resultado: puestos de división de check-in invertidos, guardianes de órdenes con problemas, operadores de media lanzados de lado a lado (algunos incluso en el suelo), un aeropuerto delirante durante unos diez minutos. La fiebre de De Rossi se disparó en Ezeiza cuando Buenos Aires todavía dormitaba.“

Habrás conocido a algunos colegas periodistas argentinos, ¿qué impresión causaron?
“Fue una de las cosas que más me impresionó. Y eso lo llevaré conmigo por mucho tiempo. Quizás en nuestras latitudes no estamos acostumbrados. Quizás el clima, la atmósfera loca que reina en Buenos Aires y en particular en todo el mundo Boca ha aumentado mi juicio positivo para todos los periodistas locales. Tuve la suerte de tener a ‘Cicerone’ Roberto Colombo, un italiano trasplantado allí, hinchas loco por el Boca, número uno absoluto para todo lo que concierne al futbol en Buenos Aires. Y luego las caras conocidas de Tato Aguilera (Tyc Sport) y Nacho Bezruk (TNT sports). Pero muchos otros niños y niñas, que independientemente de la revista para la que trabajan, me han tratado por un lado como si fuera uno de ellos desde siempre y por el otro como si fuera un comunicador de alto nivel en Italia (mah …)”

Te acercaste a Daniel, ¿qué le dijiste “en romano”? (el que te respondió?)
“Solo malas palabras. Mejor no escribir nada al respecto “😃

Bombonera, Boca-Huracan ¿De verdad tiemblas?
“Afirmo que he visto un juego que no es palpitante (Boca-Huracan es un derbi poco escuchado y, además, los hombres de Alfaro habrían tenido el regreso fundamental de Libertadores después de 3 días y, por lo tanto, salieron al campo con varias segundas líneas), a pesar de esto la hinchada allí es otra cosa. Pero otra cosa en comparación con todos los demás hinchas que vi (europeos entonces). La conformación de la Bombonera y el hecho de que el canto es prácticamente todo el estadio enloquece a Los canticos, como un trueno en una habitación. Temblar? Sí, todo tiembla”

Ahora de partida, ¿qué llevas contigo de Argentina?
“Sin retórica, el corazón de la gente, ya sea un periodista o un taxista, un camarero o un chico conocido en la calle. Pero sobre todo el deseo de volver lo antes posible. Muy pocos 6 días. Demasiadas cosas para ver, especialmente en lo que respecta a la escena del fútbol. La mayoría de los 24 equipos de Superliga son de Buenos Aires y alrededores. Muchas historias para escuchar y ver.“

¿Te das cuenta de que has sido testigo ocular de un evento que hace epoca?
“No. Pero mientras estuve allí, recibí docenas de cumplidos, apreciaciones, palabras bonitas por algo que no pude entender del todo (‘Estoy en un lugar fantástico, creo que es una vacacione en efecto: ahora incluso me elogio por esto. Creo que es demasiado … ‘).
Me fui sin saber nada, sin conocer a nadie, sin ningún plan, sin haber contactado a De Rossi u otros para obtener consejos y sugerencias. Simplemente seguí una pasión mía. De Rossi, el mejor capitán de la historia de Roma, jugador y hincha en el campo (‘seis fuimos nosotros’, jugó un estandarte con en el la Doce de Roma – la Curva Sud – en su última carrera en el Olímpico el 26 de mayo), un símbolo eterno de Roma merecía este viaje. Pero hay más. Creo que cada uno de nosotros (entre los hinchas) proyecta su propia parte de sí mismo, una forma de ser y ese ídolo se refleja a sí mismo. De modo que ese ‘mito’ no es (solo) la persona en cuestión (Daniele De Rossi) sino lo que yo (como muchos) proyecto sobre él. Soy yo Nosotros somos “Fuimos nosotros”. Y espero que incluso los hinchas de Boca lo noten pronto.“

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